Las tres encuestas nacionales publicadas en poco más de un mes revelan una pronunciada declinación en las preferencias por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y en la aprobación de su gestión de gobierno, aunque todavía conserva fuerza suficiente para ser la primera opción en las elecciones de mayo próximo.
En relación a los resultados de las elecciones del 2004, el único de los tres grandes partidos que registra recuperación es el Reformista Social Cristiano (PRSC), lo que puede relacionarse con el desgaste del poder del perredeísmo que gobernó hasta hace 16 meses y los peledeístas que le sucedieron.
Es notable que a pesar del crecimiento económico que marcan los registros del Banco Central para lo que va de año, la percepción general es pesimista respecto al futuro inmediato, con un creciente alto porcentaje que considera que el país no va por buen camino.
Pronunciada caída
El análisis de las encuestas del Centro de Investigaciones y Estudios Sociales (CIES) de la Universidad Iberoamericana, publicadas en la segunda mitad de octubre, y las de Hamilton para el Listín Diario y Gallup para HOY de las dos últimas semanas, registran similares tendencias en la opinión pública tanto sobre aspectos políticos como económicos.
Las dos últimas son encuestas acreditadas a través de más de dos décadas. EL CIES es una institución de reciente creación, pero que descansa en dos reputados sociólogos, su director Wilfredo Lozano y el director técnico Ramón Tejada Holguín. Esta ha hecho ya dos ediciones de su Radiografía Sociopolítica de la República Dominicana en base a encuestas realizadas en marzo y septiembre de este año.
La comparación en preferencias electorales parte de la votación presidencial del 2004, cuando el PLD obtuvo el 49% de la votación y su candidato presidencial Leonel Fernández el 57%, como fruto del aporte de 8% de sus aliados. Por su parte el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) consiguió 30%, y su candidato Hipólito Mejía 34, incluido más de un 3% aportado por sus aliados. El PRSC sólo alcanzó el 9%.
Cuando se han preguntado las preferencias o simpatías partidarias o intención de votos para los comicios del 2006, los resultados indican un persistente declive para el PLD y un ascenso para el PRSC.
En la encuesta del CIES de marzo, el PLD registraba un alto 59%, pero cayó al 40 en la de septiembre, aproximadamente la tercera parte. El PRD sólo crece 1 punto, del 15 al 16%, el PRSC 4 para llegar al 14%. Aquí el gran incremento fue en la población potencialmente abstencionista que pasó de 16 a 28% entre marzo y septiembre. Si se comparan sólo los que se muestran dispuestos a votar, entre marzo y septiembre, el PRD aumenta 4% y el PRSC un 6, mientras el PLD cae en 14%.
En la Gallup publicada por HOY en agosto se preguntó con cuál partido se siente usted más identificado. El resultado fue de 43% por el PLD, 20 PRD y 14% PRSC. Ahora se preguntó por cuál partido piensa votar el próximo año, y el PLD cayó al 37%, mientras el PRD subía al 25 y el Reformista al 18. Obsérvese que los dos mayores se mantienen por debajo de su votación del año pasado, mientras el PRSC la duplica.
Donde al PRSC apareció mejor fue en la de la firma Hamilton Beattie &Staff para el Listín Diario, que le otorga una intención de voto del 21 % para el 2006, lo que significa una elevación del 133% en relación a la votación del 2004. Eso podría estar avalando la hipótesis de que la votación reformista del año pasado estuvo afectada por el voto de castigo al proyecto reeleccionista del presidente Hipólito Mejía.
En cuanto al PLD y el PRD no hay variaciones significativas en relación a las otras dos encuestas, siguiendo por debajo de su votación en la última elección.
Sobre la economía
La encuesta Gallup para HOY publicada esta semana registra un 71% que cree que la economía nacional está mal o muy mal, lo que representa un aumento del 9 por ciento en relación al 62% que respondió la misma pregunta apenas 3 meses antes, en investigación de agosto. Mientras el 58 % estima que dentro de 3 años estará igual o peor, 10 puntos más que el 48% de la anterior.
Según esta encuesta, hace 3 meses el 48% de la población estimaba que las cosas iban por mal camino, porcentaje que subió ahora al 65%. Sólo el 29% considera que van por buen camino.
La última investigación del CIES, septiembre, arroja el mismo 71% de los que creen que la economía nacional está mala o muy mala. Mientras en la de marzo el 71% consideraba que la economía estaba mejor o mucho mejor que un año atrás, ese porcentaje se redujo 6 meses después al 45%. Y el optimismo de los que creían que en un año sería mejor, mucho mejor cayó del 73 al 47%, entre marzo y septiembre. En la primera el 61% creía que el país iba por buen camino, en la segunda el 63% cree lo contrario, que va por mal camino.
La encuesta Hamilton-Listín Diario midió las expectativas de la población sobre la economía para dentro de un año, arrojando sólo un 38 por ciento que cree que estará mejor, mientras 33 % que peor y 17% igual. Cuando preguntaron si el país se dirige en dirección correcta sólo el 20% lo apreció así, y en dirección equivocada se duplicó al 42%. Aunque, contradictoriamente, el 55% estima positiva la labor del presidente Leonel Fernández, contra un 42% que la califica de negativa.
Los resultados de las tres encuestas contrastan notablemente con las cifras del Banco Central que registran un crecimiento superior al 7 por ciento en los primeros 9 meses del año, con inflación de un solo dígito, lo que podría explicarse en la perversa distribución nacional del ingreso. También por el aumento del desempleo en las zonas francas y el turismo y por la sobre valoración del peso que en el último año redujo considerablemente el rendimiento de los 3 mil millones de dólares enviados por los residentes en el exterior.
Sobre la corrupción
En otros parámetros importantes la gestión de gobierno del PLD tampoco sale bien parada, como es el caso de la corrupción y la delincuencia. En la última encuesta del CIES, el 73% considera que se ha progresado poco o nada en su combate. Mientras el 71% cree que la delincuencia ha aumentado en los últimos 6 meses.
La Hamilton registró un elevado 79% que considera que hay corrupción en el gobierno. Aún el 44% de los que simpatizan por el PLD advierten corrupción en la gestión. El 51% del total cree que la corrupción es igual o peor que en el anterior período gubernamental.
La percepción sobre la corrupción choca con la intensa propaganda gubernamental que da por superado ese mal o que lo atribuye como característica exclusiva o fundamental del pasado gobierno. También indica una decepción de la población frente a los esfuerzos de las actuales autoridades por reducirla.
En la Gallup que publica HOY esta semana los encuestados expresan su preferencia por la inversión en salud, educación y ayuda a los pobres, en la creación de puestos de trabajo, electricidad y agua potable.
El CIES midió la apreciación sobre las políticas de lucha contra la pobreza y sólo el 21% estimó que los programas sociales llegan a quienes lo necesitan.
A pesar de la creciente tendencia a enjuiciar mal al gobierno, sin embargo, la imagen del presidente Fernández conserva buena apreciación. En la del CIES el 52% expresó que el mandatario le inspira confianza. En la de Hamilton el 55% estima positiva su labor.
Un balance aleccionador
El balance que arroja la comparación entre las tres últimas encuestas nacionales arroja un balance aleccionador para el PLD y su gobierno. Indica un declive temprano en relación al anterior gobierno que llegó a las elecciones del 2002 con el viento a su favor y barrió en 29 de las 32 provincias.
Cuando se profundiza un poco en los datos se advierte que el PLD y su gestión aparecen mejor valuados en el Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo y Santiago, así como en el Este, pero con diferencias significativas en el resto del Cibao y en la región sur. Para algunos analistas podría estar reproduciéndose la situación de la anterior gestión peledeísta, por su tendencia, ahora reiterada, a concentrar la inversión en las grandes urbes, especialmente en la zona metropolitana-capitalina y Santiago.
Aún esa inversión tiene una clara tendencia a ir en beneficio de los más pudientes, como las inversiones para facilitar la circulación de automóviles, en el hospital regional de Santiago, mientras sigue en descuido el suministro de medicina y la conclusión de cientos de pequeñas obras regadas por todo el país.
Otro elemento a considerar es la proclividad dela población a decepcionarse rápidamente de sus gobiernos. Se reproduce una tendencia latinoamericana fruto de la enorme deuda social acumulada con poblaciones que en más de la mitad viven en niveles de pobreza y acusan cansancio de las promesas de las campañas electorales, imposibles de materializar en uno o dos períodos gubernamentales. Por eso ya la reelección presidencial está en vías de extinción en América Latina.
Con todo el PLD sigue siendo la mayor fuerza política y podría mantenerse hasta los comicios de mayo próximo. Pero sus estrategas tienen que estar registrando los avisos que han comenzado a dar las encuestas.-